MADRE
Flor de fruto, semilla de mi flor;
rayo puro de sol, alba radiosa,
la idea más feliz, la más hermosa
nacida de la mente del Creador.
Oceánico infinito del amor;
pan de besos, maná sobre las rosas
de mis labios, el norte de las cosas
que pregunta la infancia con candor.
Rica perla de sin igual tesoro;
fiel caricia, pañuelo de mi lloro,
mirada que comprende y siempre calla.
Tus manos en mis manos ¡qué serenas!
Y sé muy bien que sólo, madre buena,
comprenderé tu amor cuando te vayas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario